La ciudad de los canales, los palacios suspendidos sobre el agua y la tradición artística más vibrante del continente se prepara para recibir a una nueva generación de creadores. Entre ellos, destaca un nombre que continúa consolidándose en la escena internacional: Madeleine Selman, seleccionada para participar en el prestigioso Premio Artista d’Europa 2025, organizado por PitturiAmo.
La noticia llega como un reconocimiento natural a una trayectoria marcada por el rigor, la sensibilidad y una identidad estética inconfundible. Madeleine Selman presentará en Venecia su obra “Oshun”, realizada en técnica mixta, una pieza que dialoga con la fuerza espiritual, la feminidad y el fluir simbólico del agua. Su inclusión en la muestra viene acompañada del “Attestato di Merito”, distinción otorgada a artistas cuyo trabajo destaca por su originalidad, fuerza expresiva y contribución al panorama contemporáneo.

Un encuentro con el arte en la Serenissima
El evento tendrá lugar del 6 al 16 de diciembre de 2025 en un espacio expositivo emblemático de la ciudad —una Venecia que, más allá de su belleza arquitectónica, cuenta con una larga tradición en acoger a los más grandes nombres del arte mundial. Durante estos días, la ciudad se convierte en un punto de encuentro donde críticos, coleccionistas, galeristas y amantes del arte convergen para descubrir nuevas miradas y tendencias estéticas.
El Premio Artista d’Europa se ha consolidado como una plataforma de difusión cultural que destaca creadores provenientes de toda Europa y otras latitudes, ofreciendo visibilidad internacional y fomentando un diálogo artístico plural. PitturiAmo, la organización detrás del evento, tiene una trayectoria sólida en el impulso de propuestas innovadoras, apoyando tanto a talentos emergentes como a artistas consolidados.
“Oshun”: símbolo, estética y resonancia

El ingreso de “Oshun” a esta exhibición adquiere un significado especial. La obra, profundamente conectada con la figura mítica y espiritual de la deidad yoruba del amor, la dulzura y los ríos, representa un puente entre lo ancestral y lo contemporáneo. En ella, Selman explora la sensualidad del movimiento y la energía femenina en su estado más puro.
Incluir esta pieza en Venecia, ciudad donde el agua es identidad y destino, potencia aún más la lectura simbólica de la obra y abre nuevas interpretaciones para el público internacional.
Un logro personal y un paso firme hacia nuevos horizontes
Para Selman, esta invitación es más que un reconocimiento: es la confirmación de un camino construido con dedicación, disciplina y autenticidad. Exponer en Venecia —uno de los centros artísticos más importantes del mundo— representa un honor y, al mismo tiempo, un punto de inflexión que proyecta su obra hacia un horizonte aún más amplio.
La artista expresó su gratitud hacia quienes han acompañado su trayectoria y extendió una invitación a quienes viajen a Italia durante esas fechas: “Si están por Venecia, ¡no dejen de visitarlo!” Un llamado cálido que subraya la importancia del encuentro entre artista, obra y espectador.
Un diciembre marcado por el arte
El mes de diciembre, lejos de la estación más turística, convierte a Venecia en un escenario íntimo: niebla suave sobre los canales, luces difusas reflejadas en el agua y salas de exhibición que cobran un brillo especial. En ese marco, la participación de Madeleine Selman promete ser uno de los momentos destacados del Premio Artista d’Europa 2025.
Con “Oshun” como estandarte y Venecia como anfitriona, Selman se prepara para escribir un nuevo capítulo en su carrera artística. Un capítulo que, sin duda, resonará más allá de las paredes de la galería y se sumará a la creciente proyección internacional de su obra.